Harry Telemacher (Steve Martin), un estrambótico hombre del tiempo de la televisión, cree que su vida es perfecta, excepto por la imprevisible relación que mantiene con una novia que es una fanática de la moda. Un día de sol radiante y contaminación espesa, el mensaje de una señal electrónica de autopista le cambia la vida, lanzándolo a un frívolo idilio con una joven y bella rubia.