Danny (Liam Neeson) es un ex-boxeador escocés que, tras doce años como minero, se encuentra desempleado intentando sacar adelante a su familia. Ahora por fin le ha llegado una ocasión de oro para ganar dinero fácil: el jefe de la mafia de Glasgow, Matt Mason, ha organizado un combate clandestino, sin guantes, y le ha ofrecido mucho dinero para que pelee. Cuando la esposa de Danny conoce la noticia, le abandona por olvidar sus principios. Ya con poco que perder, el ex-púgil acepta la oferta con la idea de ganar el dinero suficiente para vivir bien y poder recuperar a su esposa.