Zoltan era el compañero canino de un campesino rumano llamado Veidt. Una noche, el último de la estirpe de los Drácula, Igor Drácula, intenta - sin éxito - atacar a la hija del susodicho campesino y en su huida, en forma de murciélago, sacia su sed succionando la sangre de Zoltan... que pasa a convertirse en un perro-vampiro a las órdenes de su nuevo amo...