Jane Osgood (Doris Day) tiene dos hijos e intenta salir adelante gracias a un pequeño negocio de venta de langostas. Pero cuando uno de sus pedidos queda olvidado en la estación del tren, el negocio se va a pique. Jane responsabiliza entonces al dueño de la compañía de ferrocarriles (Ernie Kovacs) y, con la ayuda de su amigo y abogado George Denham (Jack Lemmon), le pone una demanda.