En 1947, dos años despues del fin de la II Guerra Mundial, el pueblo británico se ve obligado a pasar penurias, pues escasean toda clase de provisiones. Así, los alimentos están sujetos a un estricto racionamiento y a rigurosos controles llevados a cabo por los inspectores del Ministerio de Alimentación. Sin embargo, un acontecimiento mantiene al pueblo alegre y expectante: el matrimonio entre la princesa Elizabeth y el teniente Philip Mountbatten. En todas partes se quiere celebrar la boda, y en un pequeño pueblo del Yorkshire se hacen planes para cebar un cerdo de contrabando, que será el plato principal del banquete. Sacrificarlo a espaldas del inspector, escondiendo las pruebas y acallando los rumores, será el principal objetivo de Gilbert Chilvers y su esposa Joyce.